Patatas rellenas de carne picada y roquefort
La combinación entre carne y patatas es algo que todos y todas conocemos pero que puede ser potenciado si le sumamos una buena guarnición de queso azul, por ejemplo. En esta entrada os vamos a dar una receta que seguramente os resulte deliciosa, sobre todo si os gustan los sabores fuertes.
La receta que os traemos es de patatas rellenas con carne picada y queso roquefort y para preparar raciones suficientes como para 6 personas necesitaréis estos ingredientes:
- 6 patatas grandes.
- 350 gramos de carne picada.
- 150 gramos de queso roquefort.
- Queso en polvo.
- Tomate frito
- Aceite de oliva virgen extra suave (0,4º)
- Mantequilla.
- Ajo en polvo, albahaca y orégano.
- Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
Modo de elaboración
Precalentaremos el horno a 220/200 grados, lavaremos las patatas y las meteremos en el horno durante una hora y media aproximadamente para que se hagan.
Mientras tanto, echaremos un chorro de aceite de oliva en la sartén y sofreiremos la carne salpimentada, dos cucharadas de tomate frito y con un poco de queso en polvo para que se ligue bien, dejaremos que se haga y la reservaremos.
Cuando estén hechas las patatas las sacaremos y dejaremos que enfríen. Una vez frías, las cortaremos longitudinalmente, las variaremos un poco y echaremos la patata sobrante en el recipiente donde hemos dejado la carne, a la que uniremos el queso roquefort, las hierbas y un poco de mantequilla, lo mezclaremos bien todo y colocaremos dentro de los huecos de las patatas.
Cuando tengamos todas las patatas rellenas las meteremos en el horno con función horno y grill, para que se caliente todo y se gratine, derritiendo el queso y aportándole un olor, sabor y textura a la carne inigualable, lo que hará que este plato sea una delicia para los amantes del queso, especialmente aquellos que tienen un sabor fuerte como el roquefort.
Consejos
Si en lugar de roquefort queremos un sabor un poco más fuerte, una buena alternativa de queso azul es el Cabrales, un queso con carácter y mucha personalidad, pero sobre todo con un sabor cremoso bastante fuerte, algo que maridará a la perfección con la carne, independientemente de si es de ternera, cerdo, pollo o cualquier otra.
Para que la carne salga más jugosa, es mejor elegir carne picada de ternera y cerdo, es asequible y la grasa de la carne del cerdo le dará un sabor especial.